El departamento de zoología en la Universidad de Weber State está conduciendo un estudio en el efecto potencial que las luces en la “W” puede tener sobre las aves que migran a través de esta ruta migratoria.
La idea del estudio fue concebida por la administración de Weber, que había recibido múltiples comentarios preocupantes de otros profesores del departamento de zoología. Jessica Oyler, la vicepresidenta del Student Access and Success, fue el origen del involucramiento de la universidad al enfrentarse a estas preocupaciones. Oyler se puso en contacto con el profesor John Cavitt, doctor en zoología, a quien se le asignó un presupuesto y se le dio acceso a las instalaciones necesarias para el estudio.
“Parece muy completo, y es genial que pueda contar con la participación de tantos estudiantes. Estoy muy emocionada”, afirmó Oyler.
Cavitt recibió permiso para hacer el estudio disponible a estudiantes quienes van a ser los proveedores principales de colección de data y completación de los procesos del estudio. Los estudiantes que desean estar involucrados con este estudio deben registrarse a Zoology 4920 teniendo permiso de Cavitt. Aquellos que deseen participar por más tiempo que el semestre recibirán una compensación económica por el tiempo dedicado.
Se solicita la inscripción de estudiantes de todos los orígenes y departamentos, ya que hay múltiples funciones importantes que ayudarán a todos los estudiantes a adquirir experiencia aplicable para sus futuras carreras, ya sean carreras STEM o de otro tipo.
“Lo hemos organizado de manera que tengamos una clase, y esa clase se reunirá una vez a la semana. La clase está diseñada para presentar el tema a todo el mundo, pero luego poner en marcha los proyectos. Los estudiantes se harán cargo de los distintos componentes. Hay tantos elementos diferentes que será necesario que la gente dé un paso al frente y asuma el liderazgo en los distintos componentes”, dijo Cavitt.
Cavitt se puso en contacto con la dirección de las instalaciones para colaborar con ellos en los diferentes procesos necesarios que habrá que poner en marcha para que el estudio tenga éxito. El estudio consta de dos semestres diferentes, comenzará en primavera, hará una pausa durante el verano y se reanudará en otoño.
Los estudiantes participarán en el estudio recopilando datos de muchas formas diferentes, mediante herramientas como sensores electromagnéticos, y tomando nota de cuántas aves viajan por la ruta migratoria y cuántas se detienen en la “W”.
“El monumento conmemorativo del 11-S de Nueva York tiene unas luces que brillan como parte del memorial. Se ha demostrado que… son un gran atractivo para las aves. Lo que han descubierto es que, al apagar las luces cuando empiezan a atraer a las aves y dejarlas apagadas durante 10 minutos, las aves se dispersan y se pueden volver a encender. Así que con solo apagar rápidamente la luz se puede restablecer el comportamiento natural de las aves. Esperamos que quizá un color diferente o algo por el estilo también sea eficaz”, dijo Cavitt.
Este estudio se está llevando a cabo debido a la preocupación de algunos profesores que ven una correlación entre el brillo de los LED que rodean la «W» y el hecho de que las aves se detengan a descansar cuando deberían seguir volando. Cavitt compartió la preocupación de que, cuando las aves se ven afectadas por la “W”, podrían volar en círculos en lugar de continuar con la migración.
Las aves afectadas también son más propensas a chocar contra las ventanas y menos propensas a comer, ya que se vuelven letárgicas por la falta de descanso y no pueden alimentarse tan bien. El estudio tiene como objetivo encontrar soluciones a estos efectos, si es que existen, mediante el apagado de las luces en determinados momentos, así como el cambio del color de las luces, que podría no afectar a las aves de forma tan severa, si es que lo hace.