“Dìdi”, dirigida por Sean Wang, se estrenó mundialmente el 25 de enero en el Festival de Sundance de este año, y también estuvo disponible en Internet hasta el 28 de enero.
“Dìdi” es una película de madurez sobre un chico taiwanés llamado Wang Wang que ha crecido en California. La película muestra las dificultades de Wang Wang en su adolescencia, como aprender a querer a su madre, coquetear por primera vez y encontrar su lugar en el mundo.
La película participó en la competencia U.S. Dramatic y ganó dos premios: el Premio del Público en la categoría U.S. Dramatic y el Premio Especial del Jurado U.S. Dramatic: Conjunto a su reparto.
“Este reparto trabajó en equipo, como una hermosa sinfonía. Había gente de diferentes edades y distintos niveles de experiencia y, sin embargo, este grupo de actores daba la sensación de conocerse y haber trabajado juntos desde siempre”, declaró el jurado del festival, según un comunicado de prensa del Instituto Sundance. “Es la química entre estos actores lo que ayuda a dar a esta película su sentido de la vitalidad y ayuda a dar vida a las alegrías y dolores de crecer”.
El reparto era especial para Wang porque su abuela interpretaba a la abuela del protagonista, Nai Nai. Al principio, Wang temía que no encajara bien, pero después de la primera lectura, él y su equipo supieron que encajaba a la perfección.
La película es un auténtico relato de madurez. Muchas de las experiencias por las cuales pasa Wang Wang pueden resultar familiares al público. Intentar encajar y ser ” cool ” utilizando la jerga de la época, pero acabar diciendo todas las cosas equivocadas, buscar cómo besar en Internet y practicar con una manzana o incluso tener peleas a gritos con tus hermanos y quitarles la ropa.
La película se inspiró en la propia infancia y educación de Wang. Su objetivo era crear un reparto y una película con personas similares a las de su infancia. Por eso empezó como una carta de amor a los amigos de Wang, pero a medida que continuaba creando la película se convirtió en una carta de amor a su familia, a sus amigos y al lugar en el que creció.
Wang experimentó con distintas técnicas de cámara y utilizó Internet. Wang creó escenas en las que parecía que los miembros del público estaban sentados ante la pantalla de la computadora buscando cosas en Google o viendo los vídeos.
Explicó en una sesión de preguntas y respuestas que muchos directores intentan evitar que parezca que el espectador está mirando una pantalla, pero en “Dìdi”, Wang encontró la forma de integrarla en la película, haciéndola más personal y realista, además de etablecer la época.
Wang también utilizó un trabajo de cámara tipo videoblog, en el cual la película era rodada por el protagonista, lo que le daba un aire de vídeo casero.
Lo que Wang esperaba de esta película era recordar su infancia y que los espectadores recordaran la suya y se dijeran a sí mismos de 13 años que no tenían por qué ser tan duros consigo mismos.